¿Cómo se vivió y se vive la cuarentena en Tulum?

¿Cómo se vivió y se vive la cuarentena en Tulum?

By Paulina Sierra (@potspotting)

Pues la vida me puso en el lugar indicado en el momento indicado, y de tener planeado ir por un fin de semana a uno de los destinos turísticos más codiciados y conocidos en México y el mundo, me quedé por 3 meses y les quiero contar cómo se vivió el distanciamiento social en Tulum.

Todos los hoteles de la zona hotelera – vaga la redundancia – o sea, el Azulik, Nomade, Be Tulum, Casa Malca, etc estuvieron completamente cerrados. Esto se fue dando gradualmente, pero en la fase más crítica, únicamente los propietarios o personal de los hoteles podía pasar a esta zona. Había un filtro de seguridad antes de entrar a esta parte y se necesitaba un gafete especial para poder acceder. Al día de hoy, ya hay varios de ellos abiertos. De igual forma, comenzaron a abrir gradualmente desde el 8 de junio, pero solo tienen permitida una ocupación del 60% o menos.

Lee también: ¿Qué se siente viajar sola al otro lado del mundo?

¿Qué hay de los cenotes y lagunas cercanas? La mayoría de ellos estaban cerrados. Hay algunos muy pequeños y escondidos que sí los encuentras es una suerte, pues seguro serás el único ahí en cualquier época del año.

Los restaurantes, bares y tiendas también estuvieron cerrados al 100% y muchos aún continúan únicamente con el servicio a domicilio o para llevar. Las cervezas también se agotaron por acá y eso nos tenía muy tristes a todos, la buena noticia es que las caguamas continuaron disponibles, sin pausa alguna.

¿Qué pasa con los extranjeros que estaban aquí y no pudieron regresar a su país? Pues les cuento, la mayoría de mis vecinos está en esa situación. Es gente que venía de vacaciones o por una corta temporada y que ya no pudo regresar a su casa porque las fronteras están cerradas o porque los boletos de avión son impagables o porque tienen que hacer más de 3 escalas. Pero la mayoría de ellos sigue disfrutando el salir a andar en bici, caminar por el pueblo y hacer compras a los locales de la zona.

Lee también: 5 maneras de mantener la paz en tiempos de Covid-19

¿Lo bueno? Playas limpias y desintoxicadas. Agua azul-azul, como la que nos imaginamos siempre que pensamos en la Riviera Maya y muchos animales felices que andan por ahí.

Después de estar 3 meses por allá, les puedo contar, aunque no viera el mar todos los días, el hecho de estar cerquita de él sí hace la vida mucho más liviana y se respira un aire diferente, algo mucho más tranquilo y relajante. Uno de mis propósitos más grandes en la vida era vivir unos meses en Tulum, un lugar que me enamoró desde el primer día que lo pisé, pero varias razones me impedían que moviera de la ciudad. Ahora, lo único que me queda es agradecerle al universo por haberme puesto en este destino durante un tiempo tan largo para aprender de aún más de mí, de la naturaleza y para arrancar dos proyectos increíbles que les estaré contando próximamente.

The Every 2020. Todos los Derechos Reservados.

Welcome to The Every. Subscribe

We don't send spam